EN UNA CAJA VERDE

“Cuerpo triste cuerpo triste, por donde entraste saliste.”

Hace ya meses viniste, metido en una caja verde. Mis manías, como si hubieran leído el libro del destino, como si ya supieran lo que iba a acontecer, me hicieron guardar tu envoltorio como recuerdo. Sin embargo, hoy, esa caja verde, hará las veces de ataúd, hoy, me será una herramienta mas para el olvido.